miércoles, 20 de noviembre de 2013
sábado, 2 de noviembre de 2013
LAS TROMPETAS
LAS TROMPETAS
Ap 8:1
Cuando el Cordero rompió el séptimo sello, todos en el cielo guardaron
silencio durante media hora.
8:2
Entonces vi que se le dio una trompeta a cada uno de los siete ángeles
que estaban de pie delante de Dios.
8:3
Después vino otro ángel con un tazón de oro, y en ese tazón pusieron
mucho incienso, para que lo ofreciera ante el altar junto con las oraciones del
pueblo de Dios.
8:4
El humo del incienso subió de la mano del ángel, junto con las
oraciones, hasta donde estaba Dios.
8:5
Entonces el ángel tomó el tazón y lo llenó con los carbones encendidos
que estaban sobre el altar. Luego, lanzó todo sobre la tierra, y por todos
lados hubo un fuerte ruido de truenos, y relámpagos, y un temblor de tierra.
8:6
Después, los siete ángeles que tenían las siete trompetas se dispusieron
a tocarlas.
El
capítulo 7 termina con las promesas de consolación y bienaventuranzas de Dios
para sus siervos fieles que se han negado a sí mismos, han tomado su cruz y han
seguido a Jesús hasta la muerte y aún más allá.
El
capítulo 8 empieza con una escena en donde se hace silencio y se les dan
trompetas a 7 ángeles. Las trompetas en la Biblia, por lo general, indican
advertencia; ahora, vienen 7 ángeles a tocar 7 trompetas, Dios va advertir a la
civilización humana rebelde, no a su pueblo, que YA ha sido sellado, es decir,
protegido de los juicios que vienen.
El
silencio en el cielo es extraño, ya que antes hemos visto a los ángeles
cantando y a los redimidos cantando alabanzas a Dios; pero hay un gran
silencio! Luego del silencio y antes de que suenen las trompetas viene un ángel
con un tazón para ofrecer mucho incienso. Aquí la idea es que el cielo hace
silencio para escuchar las oraciones de los santos, nada es más importante para
Dios que las oraciones de sus hijos, como dice Barclay, la alabanza angelical y
el trueno de la revelación callan para que Dios escuche el susurro de la
oración de los más humildes que confían en Él; todo se detiene para
escucharlas, los ángeles les añaden mucho incienso, para que sean de olor grato
delante de Dios, es decir, son purificadas de todo egoísmo o contaminación.
Luego
de esta escena, el ángel toma de los carbones con los que quemó el incienso
ante Dios y lo arroja sobre la tierra. Esto muestra que Dios contesta las
oraciones de sus santos. Los juicios que van a venir con las trompetas son la
respuesta de Dios a las oraciones de sus santos; al caer los carbones sobre la
tierra se producen truenos, relámpagos, terremotos; en el lenguaje bíblico de
los profetas del AT es la manera de describir una intervención de Dios, en este
caso, con juicios. Acto seguido vienen las primeras 4 trompetas.
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